Memorias de la lucha Sandinista

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EL PRESUPUESTO NACIONAL

Y EL CALVARIO DE LOS POBRES1


Ojala que la Refinería que financiará el pueblo venezolano,

no tenga el triste fin del Ingenio Victoria de Julio que regaló

el pueblo cubano”



Señor Presidente:


Todos sabemos que el instrumento central que define el perfil y las prioridades de un gobierno es el Presupuesto General de Ingresos y Egresos de la República.


Sabemos que no sólo por el lado de los ingresos, tema que no abordaremos en esta ocasión, pero, sobre todo, por el lado del GASTO, se definen los sectores a quienes se destina la mayoría de los fondos contenidos en el Presupuesto General del país.


El Presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, al asumir el cargo en enero de 2007, prometió que el centro de las prioridades de su gestión sería la población excluida, con hambre, sin trabajo, víctima de 16 años de políticas neoliberales y de la corrupción. Entonces, uno estaba obligado a pensar que el Presupuesto tendría que expresar claras diferencias con la propuesta presupuestaria de su predecesor Enrique Bolaños, y reflejar claramente prioridades a favor de los menos favorecidos. Pero debemos decir con claridad que el cambio en materia presupuestaria no ocurrió.


Uno se pregunta por ejemplo: los incrementos resultantes de los 29 millones de dólares provenientes de la cooperación externa, entre ellos, la condonación de la deuda con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), que produjo un ahorro de aproximadamente 26.5 millones de dólares, más los recortes presupuestarios de las instituciones, ¿a quién se asignaron esos recursos?


Hay dos instituciones sobre las que recae la presión cotidiana de la población más pobre: el Ministerio de Salud (MINSA), y el Ministerio de Educación (MINED). Si la posición del gobierno fuera consecuente con el compromiso de priorizar a los sectores excluidos, estas dos instituciones deberían de recibir el mayor porcentaje de los recursos adicionales, pero ¿qué ocurrió? Ambas instituciones están recibiendo incrementos irrisorios, incrementos que, en cierta forma, son una burla frente a la gran expectativa generada por el gobierno actual. Son incrementos, escúchenlos bien, que no sobrepasan, en ningún, caso el 1% de lo que asignaba Bolaños a dichos ministerios.


En el caso del MINSA, no aborda para nada la principal necesidad de los excluidos, que es la demanda de medicamentos gratuitos. ¿De qué sirve que la gente vaya a los centros de salud y hospitales, si no tienen dinero para comprar sus medicinas? Sin duda este Presupuesto ¡es más de lo mismo!


El incremento en Educación apenas permitirá cerrar la brecha de los fondos que provenían de las famosas “ayudas voluntarias” de los padres de familia. Buena medida que hemos aplaudido. Pero se esfumaron las expectativas de mejorar, este año, las condiciones precarias de los centros escolares, la falta de pupitres, el mejoramiento de las aulas y, sobre todo, aumentos salariales verdaderamente sustantivos para los maestros. Todos los aumentos salariales eran los que ya estaban contemplados en el Presupuesto neoliberal de Enrique Bolaños. Sin duda este Presupuesto ¡es más de lo mismo!


Hoy más que nunca se sospecha que durante los gobiernos anteriores las matrículas eran infladas, porque a pesar de que la matrícula no aumentó, y más bien disminuyó, hay muchos centros en donde no hay espacio para los estudiantes y se han instalado carpas para albergar estudiantes. El nuevo gobierno había creado la expectativa que frente a incrementos de las matrículas contrataría a maestros que andan en las calles sin trabajo fijo. Únicamente voy a poner un ejemplo. Este fin de semana estuve reunida con pobladores de Nandaime y me contaban que el MINED, había contratado a 54 nuevos maestros. Pero hace unos días les anunciaron que sólo 12 de ellos serían contratados efectivamente porque no hay Presupuesto.


No voy a extenderme en cifras, que brindó extensamente mi compañero de bancada Enrique Sáenz. Solamente quiero resumir: de los mil cuatrocientos millones adicionales, sólo el 37% se destinan a las Instituciones del Estado en general, y de ese porcentaje sólo una mínima parte se destina a las instituciones y programas sociales. La mayoría va para reservas del Banco Central y para pago de compromisos de la deuda, en particular de la deuda interna.


Según el prestigiado economista Adolfo Acevedo, el 62.5% de ese aumento de recursos, equivalente a US$ 73.5 millones, se orientará hacia el aumento en el servicio de la deuda pública y en las transferencias al Banco Central, que se verificará en comparación al 2006, y sólo el 37.5% de dicho aumento global en los recursos presupuestarios, US$ 44.2 millones, se orientaran hacia el aumento del Gasto Primario del Gobierno, es decir, el gasto del gobierno destinado a cumplir con sus responsabilidades fundamentales en materia de educación, salud, vivienda, infraestructura física, defensa y seguridad ciudadana, etc.

 

Es evidente que el grueso del aumento de los recursos presupuestarios se orienta (en un 62.5%) hacia usos que podemos denominar “financieros” (servicio de la deuda pública y en las transferencias al Banco Central) y sólo una proporción mucho menor (37.5%) se orientará hacia usos que podríamos denominar “reales” (educación, salud, seguridad alimentaria, etc.). La prioridad fundamental, y el tipo de usos que se privilegia, parecen claros.

 

En otras palabras: En este Presupuesto del gobierno de Daniel Ortega, no hay cambios sustantivos en las prioridades. La orientación presupuestaria sigue con el mismo carácter propio de una política neoliberal. No se observa ni siquiera la intención de iniciar el cumplimiento de los Objetivos del Desarrollo del Milenio.


Por eso afirmamos que este Presupuesto es Neoliberal y es el mismo Presupuesto de cualquier gobierno de derecha.


Pero también hemos de decir que se mantienen el uso de fondos públicos para un dudoso destino. Es más, podemos calificarlo de fondos que favorecen la corrupción.


Y hay que decir que aquí se ponen en evidencia que en este Parlamento hay diputados de primera y de segunda. Hay diputados que tienen la prerrogativa de asignar fondos a entidades. Otros no.


¡90 millones de córdobas son asignados a asociaciones de abogados, iglesias y organismos no gubernamentales, ONG, ligados a los partidos del Pacto. Son fondos públicos para favorecer a organismos, algunos de los cuales se ha demostrado, son inexistentes y encubren actos de corrupción para favorecer a allegados y partidarios.


Hay en la lista organismos que merecen apoyo, como el Cuerpo de Bomberos, museos, teatros municipales, grupos de artistas de renombre y asilos. Pero en aras de la transparencia deberían ser asignados por medio de las instituciones responsables de estas tareas para someterlos a control presupuestario, para saber si realmente usan los fondos asignados para los fines anunciados. Es más, algunos hasta deberían recibir más fondos. Por ejemplo, los Bomberos de Managua. Me comentaban que habían solicitado seis millones, les habían asegurado cuatro, pero realmente sólo les estaban asignando 2 millones de córdobas.


No estamos en contra que se asignen fondos a entidades no gubernamentales, o de bienestar social, pero deben hacerse de manera transparente.


Las ONGS, deberían de luchar por los derechos de las gentes, buscar financiamiento de la ciudadanía como hace el teletón, o gestionar recursos externos. Pero no tiene sentido que vengan a buscar migajas para luego deberle favores a ciertos diputados que gestionan los recursos asignados. No tiene sentido que se asignen recursos a organismos no gubernamentales para construir canchas deportivas, por ejemplo, cuando se trata de una función propia de las municipalidades que debe ser asumida en el marco de las transferencias presupuestarias destinadas a los poderes locales.


No tiene sentido que se asignen 12 millones de córdobas de los fondos del Presupuesto General de la República para la Universidad Católica (UNICA), una entidad privada que todos saben que cobra grandes aranceles a los estudiantes.


Estos fondos, además, expresan una manera de hacer política basada en el clientelismo, la compra de conciencia y la corrupción. Si se quiera apoyar a entidades que lo merecen, estas instituciones deben recibir esa ayuda a través de mecanismos institucionales y no de los favores de tal o cual diputado.


Este Presupuesto es de derecha y es neoliberal, porque expresa el sometimiento a las políticas de los organismos financieros internacionales, entre ellos el Fondo Monetario Internacional, FMI y el Banco Mundial, BM.


Daniel Ortega se comprometió a hacer negociaciones con el FMI para buscar flexibilizar las condicionalidades a que nos han sometido todos estos años, a través de los gobiernos dóciles a sus políticas.


Este Presupuesto del nuevo gobierno es un reflejo fiel del “Marco Presupuestario de Mediano Plazo” 2007-09, enviado por el Presidente Enrique Bolaños, y las reformas estructurales que allí se postulan permanecen inmutables:


La política salarial de hambre: no habrán incrementos sustantivos en los salarios, porque hacerlo atenta contra la disposición del FMI de mantener en 7% la inflación.


Reafirmación de la política crediticia: ¿A dónde se fue la promesa de crear un Banco de Fomento a la Producción? No habrá una real política crediticia para los medianos y pequeños productores, si se mantienen las medidas ya anunciadas por el Banco Central para mantener los niveles de las reservas internacionales.


¡La misma política de Deuda!: La prueba más evidente de que no hay cambios en la política presupuestaria, es la fuerza y arrogancia con que diputados danielistas han afirmado que honrarán la onerosa de deuda pública interna que hasta ahora mantuvieron los gobiernos neoliberales. Hasta el uso de la palabra es inadecuado, porque honrar, viene de honrado, y lo que está detrás de la deuda interna es el robo descarado a la economía del pueblo realizada por quiebras fraudulentas de bancos, por banqueros, por malos funcionarios y por gobernantes que deberían estar pagando sus pecados en la cárcel.


Pero más importante que todo lo anterior, me resulta vergonzoso que estas políticas de derecha se quieran sostener con la cooperación solidaria internacional de Venezuela y Cuba.


Es vergonzoso que se usen los fondos solidarios de la Revolución Bolivariana destinados para paliar la miseria, mientras los fondos que se recaudan de los bolsillos de los nicaragüenses sirvan para regalárselo a los banqueros.


Resulta vergonzoso que le pidamos a la Revolución Cubana que mande sus médicos a realizar labor humanitaria, mientras desde el Presupuesto se sostiene una política interna que favorece a los grandes grupos económicos. Le vamos a pedir ayuda a gobiernos pobres para regalarles aquí el dinero a los ricos.


Sería un crimen sostener con la generosidad de la Alternativa Bolivariana para las Américas (ALBA), políticas que favorecen a las grandes transnacionales, políticas privatizadoras y el enriquecimiento de pequeños grupos de poder.


De poco sirve tener en privado una retórica progresista, sea, en los salones del Palacio de Miraflores o en los locales de la Secretaría Nacional del Frente Sandinista, y luego venir aquí a pedirnos que aprobemos un Presupuesto y más grave, una política económica presupuestaria, en fin, una política de derecha, que únicamente favorece a los ricos y a los banqueros nacionales y extranjeros. Que sólo favorece a las políticas de libre mercado impulsadas por el señor George W. Bush.


Con las políticas que contiene este Presupuesto no nos queda más que desear que ojalá que el hermoso y generoso proyecto de la refinería ofrecida por el Presidente venezolano Hugo Chávez, no tenga el mismo y vergonzoso fin del Ingenio “Victoria de Julio”, regalado a Nicaragua por el pueblo cubano.


Termino diciendo que este Presupuesto y las políticas que contiene no resisten las exigencias mínimas de una izquierda honrada y auténtica. Podrán todavía seguir engañando a otros por un tiempo, pero les resultará difícil engañarnos a todos, todo el tiempo.






NOTA


1 Intervención de la Diputada Mónica Baltodano en el Plenario de la Asamblea Nacional en ocasión de la aprobación del Presupuesto 2007. 6 de marzo de 2007.


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